Perreé un ratito en la cama por que no había leído este post de una de esas amigas a las que nunca he visto pero con la que comparto más sensaciones que con mucha gente de la que me cruzo a diario. A veces, si las cosas están bien de una manera, es mejor no tocarlas y compartir cosas desde la distancia y el anonimato tiene su encanto. Por suerte (o por precaución) no creo que mi cama me absorba. Según la milenaria tradición del feng-shui, mi cama está orientada hacia el norte, lo que facilita el fluir energético y, así, el cuerpo descansa mejor.
Ahí, pongo la radio, mientras voy estirando la espalda. Hay alegría desbocada en los mercados por el acuerdo obtenido en la cumbre de mandamases europeos. Por mi, los fusilaba a todos, malditos títeres. Se cifra en 159.000 millones de euros la aportación a una especie de fondo de protección. Así, el cotarro especulativo (en el sentido despectivo del término) sigue retroalimentándose. Mientras, en el cuerno de África, una hambruna amenaza a 40 millones de personas. Se calcula que con 1.900 millones de euros (el 0´75% de ese fondo), se arreglaría el problema. Siempre y cuando ese dinero se repartiera bien, claro. De los 4000 millones que se mandaron a Haiti, cuando lo del terremoto, la mitad se esfumó antes de llegar a las bocas de los haitianos. Pero claro, preservar el mercado del cuerno de Somalia u organizar una gestión eficiente de los recursos enviados no es tan importante como que todos aquellos países que gastaron demasiado más de lo que tenían, puedan seguir gastando y emitiendo una deuda pública que genere rendimientos jugosos.
Ver a los cerebros de las hipotecas basura y reconocidos encubridores del pastel de mierda que se estaba generando en su día, en cargos políticos de influencia en Estados Unidos, controlando la pasta y ayudando a sus ex-empresas, daba vergüenza y miedo. Pero aqui no vamos a menos. Se ha puesto como presidente del Banco Central Europeo al directivo de Goldman Sachs que mejor ayudó a Grecia a camuflar el pufo que contenían sus cuentas. Mas zorras a vigilar el gallinero. Puedes esquilar una oveja las veces que haga falta, pero despellejarla, la vas a despellejar sólo una. Y a base de esquilarnos varias veces por temporada, nos están despellejando. Y eso, no se como se va a acabar pronto, mal que les pese.
Al levantarme, repaso mi bibilogteca. Al leer este post en el blog de Juan de Diego, sobre el proyecto de la ley del juego, me entra una semi-depresión. Cuanto inútil bien pagado hay por ahí, suelto...
(editado)
La verdad es que el post anterior estaba empezado a escribir el viernes al levantarme. Como aprovecho el título del mismo, pues también estoy de mala leche a la vuelta de un torneo de poker. No por que me hayan echado, de eso estoy acostumbrado (feitinho, que decimos aqui...), que no lo han hecho (aún). Es por que creo que voy a un torneo decente (barato y con una estructura jugable) y la terminan cagando, como tantas veces. No entiendo dos cosas. Una, por que a un torneo así van sólo 46 personas, en pleno mes de Julio, aunque ese no es mi problema. Dos, y eso si que aprieta, es por que deciden cortarlo cuando quedan 20 personas, a las dos de la madrugada. Si estiras los premios de un field de 46 para que cobren 10 (el 10º palmará pasta)... ¿por que no terminas el dia 1 con la gente en premios?. El que vaya al día 2, al menos lleva algo. Pues no. Vuelve el sábado para saltar el 12, ilovethisgame... Dos viajes a la City para nada mas que pasar un rato agradable.Agradable, igual. Rentable, para nada.
Remodelan el Casino que te cagas, dejando una poker room para torneos donde caben 200 y no solo traen a 46.
Encima, la info de la situación del torneo iba muy retrasada. Estaba decidido a jugármela para volver en condiciones o irme pa casa y aprovechar el sábado enterito en otras cosas. Cuando pensaba que quedaban 27 resulta que eran 23. Ni me pude mover en las cinco manos que finiquitaron el día 1. Ahora tengo que volver para jugar 23k puntos (la media). Ni decir tiene que, la próxima vez, me lo pensaré dos veces antes de ir. Es posible que tenga mejores cosas que hacer, que las tengo... Debe ser otra indicación del Destino Universal. Que el poker no es lo que tengo que hacer, carallo, a ver si me entero...
(editado)
La verdad es que el post anterior estaba empezado a escribir el viernes al levantarme. Como aprovecho el título del mismo, pues también estoy de mala leche a la vuelta de un torneo de poker. No por que me hayan echado, de eso estoy acostumbrado (feitinho, que decimos aqui...), que no lo han hecho (aún). Es por que creo que voy a un torneo decente (barato y con una estructura jugable) y la terminan cagando, como tantas veces. No entiendo dos cosas. Una, por que a un torneo así van sólo 46 personas, en pleno mes de Julio, aunque ese no es mi problema. Dos, y eso si que aprieta, es por que deciden cortarlo cuando quedan 20 personas, a las dos de la madrugada. Si estiras los premios de un field de 46 para que cobren 10 (el 10º palmará pasta)... ¿por que no terminas el dia 1 con la gente en premios?. El que vaya al día 2, al menos lleva algo. Pues no. Vuelve el sábado para saltar el 12, ilovethisgame... Dos viajes a la City para nada mas que pasar un rato agradable.Agradable, igual. Rentable, para nada.
Remodelan el Casino que te cagas, dejando una poker room para torneos donde caben 200 y no solo traen a 46.
¿Parece lleno? Es por que no saqué las 15 mesas vacías...
Encima, la info de la situación del torneo iba muy retrasada. Estaba decidido a jugármela para volver en condiciones o irme pa casa y aprovechar el sábado enterito en otras cosas. Cuando pensaba que quedaban 27 resulta que eran 23. Ni me pude mover en las cinco manos que finiquitaron el día 1. Ahora tengo que volver para jugar 23k puntos (la media). Ni decir tiene que, la próxima vez, me lo pensaré dos veces antes de ir. Es posible que tenga mejores cosas que hacer, que las tengo... Debe ser otra indicación del Destino Universal. Que el poker no es lo que tengo que hacer, carallo, a ver si me entero...
En cuanto me levante, me piro a la playa, a que me de el aire. Si sigo leyendo o dándole vueltas, me dará por hacer las maletas y pirarme a Islandia...