Las Vegas. Dia 10

Lo mejor para una resaquilla es un buen baño. Ha sido en el último día cuando estrené la piscina del Hotel. Perico no quiere venir. "Sólo me falta llegar moreno a casa". Bajé con el novio y la novia. Aquello parecía Silicon Valley. Los cócteles van que vuelan. En el jacuzzi se está de vicio...

Llegó otro que no nombro. Al respecto de la camarera dijo: "Ese culito me lo comía sin pan". En un campeonato de brutos se lleva mención de honor...

Perico no encuentra sus zapatos. Es lo que tiene llegar a cuatro patas. Y es lo que suelen tener las bodas. Me propone que atraquemos un Casino. Tiene toda la pinta de que saldré de Las Vegas sin casarme y sin hacerme un tatuaje, con lo que prefiero no arriesgarme a terminar en el calabozo o en el desierto de Mojave... La novia ya no hace falta que busque sus medias...

Después de un ratito al sol y una buena siesta, la última reunión en la habitación de Vanessa.

Hacemos balance de cada uno. En esos momentos era el que mas pierde del desafío (sip), 1260$. El equipo ganó ayer 1700$ para un balance de casi 12000$ arriba.

Preparamos la maleta y fuimos a por los últimos souvenirs, antes de cenar y hacer la última sesión. Pensamos en deshacerle la maleta alguien. Hicimos cábalas de quien será el que llega mas pedo para imaginar su cara cuando vea su equipaje esparramado por la habitación. Este es el hotel donde estuvimos. El pobre aún no había salido en ninguna crónica...

Cenamos en el Harley Davidson café.

Para ir al Wynn´s cogimos el Deuce, el autobús que recorre Las Vegas.

Hicimos una sesión en 10/20 que Perico preferirá olvidar. Nos petaron, entre los dos, cinco trios, por poner un ejemplo. y en la mesa se sentó una tipa que se traía una ensalada en un tupper. ¿Hay una manera mas clara de decir que vienes a trabajar?. Yo me quedé 6 horas, hasta que la mesa se desmontó. Me petaron otros ases y dos trios. Al final, 148$ abajo. Me iba a apuntar a 4/8 pero ¿pa qué?. Al final seré el que mas pierde de los treinta. Espero, por que si no querrá decir que le han dado un palo gordo a alguien. Lady Variance no se portó muy bien conmigo esta semana. Mi tracker mental tiene algunos datos muy feos. Tardé 27 parejas en conseguir mi primera trucha. Tuve 6 veces AA y me violaron cinco. Dos de los primeros tres tríos saltaron por los aires. No gané ninguna de las cinco QQ que tuve. En fin. A alguno le tenía que tocar palmar, pero me jode que sea a mi. Hubiese sido un viaje inolvidable si no es por el lado poqueril. De todos modos sigo pensando que hay ventaja suficiente en las mesas como para sacarle un sueldo mensual. El problema es que para vivir de esto tienes que llevar una vida muuuuy ordenada. Y eso, en Las Vegas, se me antoja terriblemente difícil. Hay que tener la cabeza muy bien amueblada.
Ahora, a dormir un ratito. En cuatro horas salimos hacia casa. Ya tengo ganas de volver a Las Vegas. Me han quedado una pila de cosas por hacer: El atardecer en el Stratosphere, visitar Fremont, el outlet norte, el Playboy club, el espectáculo de las fuentes del Bellagio, The Blues Man en el Venetian, a The Killers, el BarCode y la sesión dark del Krave, Zumanity del Circ du Soleil y una pila de Casinos. El año que viene vuelvo. Si me dejan, claro...