Rumbo a La Toja (again...)

Parece mentira como se van los meses... Ya toca otra etapa en La Toja. Después de una buena siesta reparadora, de esas de pijama y orinal, tengo el petate listo para la etapa 9 de la liga 2009. A ver si me dan la silla 9 de la mesa 9, que no somos supresticiosos....
Tengo un feeling de ni fu ni fá. Voy a estar tranquilito y a moverme sólo con fundamento., que es lo que me ha dado resultados en ese toreno. Los experimentos no me han salido bien este año en La Toja, la verdad...
La siesta me hacía falta. Esta semana eché como 55 horas de jornada. No las cuento exactamente, por no coger una hepatitis. Hoy estaba a las 9 de la mañana en Sarria, a 130 kms. de casa. Luego Becerreá, Castroverde, A Fonsagrada y Meira. En los casi cinco años que llevo en Galicia no había estado en ninguno de esos pueblos, lo que era un buen aliciente. Además, la meteorología me regaló un fenómeno que llamo mar de niebla. Como veréis, a baja altura la bruma impide la visibilidad (y jiña un buebo al conducir), pero cuando ganas altura, en los puertos, el espectáculo es soberbio. Entre Sarria y Becerreá hay un tramo de carretera ratonera, con curvas reviradas que valdría para un anuncio de esos de me gusta conducir... Me lo pasé pipa.

Subiendo a A Fonsagrada, el fenómeno se repitió...

En el alto, los gigantes modernos dominan el valle...

En fin, una paliza de kilómetros pero muy bien amenizada visualmente. Me falló la música. Como pille al que me recomendó Apocalyptica se come un cactus, maceta incluida. La idea parece buena, un cuarteto de violoncelistas que hacen versiones de heavy metal. Cajonacona... Eso es lo que debía escuchar Jack el Destripador antes de salir de paseo vespertino...

(¡suerte, neno, en La Toja!). ¡Gracias, majo! Siempre viene bien...