domingo, 31 de marzo de 2013

Chove en Santiago

Este mes traté de organizar mi ciclotimia, pero no salió demasiado bien.  Ya sé, lo hablamos a menudo; se puede fluir, pero no nadar contracorriente.  Aún así quise intentar que no me coincidiera el pico bajo con el fin de mes, pero exprimí demasiado el subidón.  El resultado es más lluvia en el alma que en la calle, que ya es un decir, estos días.

No deberían afectarme los aniversarios, nunca les dí importancia.  Pero estos dos de marzo, el tuyo y el de Maribel, me cuesta pasarlos.  Probablemente porque viendo la cantidad de malnacidos que siguen respirando un aire que no merecen, me sigue pareciendo muy injusto que dos personas como vosotras, con esa alegría inacabable, a pesar de lo que se pudiera torcer el Camino, ya no estéis entre nosotros.  Físicamente, claro.

jueves, 21 de marzo de 2013

Dios sigue estupendo

Todo el que me conoce bien sabe de mi pasión por la música y por las sensaciones extrañas (para la mayoría) que me pueden producir las canciones.  A pesar de eso, no soy nada "fan" de los artistas. A pesar de  la multitud de discos firmados que hay en casa (que tengo por haber coincidido en un backstage o casualmente con el autor del cd), nunca haría diez minutos de cola por un autógrafo de Robert Smith, por poner un ejemplo.

Un concierto en directo es uno de mis hobbies favoritos y, aunque suelo pasármelo estupendamente a poco que el grupo tenga un mínimo de calidad, tampoco me vuelvo loco.  Dos veces tuve una experiencia mística frente a un escenario.  Una no creo que pueda contar como tal (Tarja Turunen de Nightwhish) por que había abusado de determinados estupefacientes que facilitan la empatía con el entorno.  Pero otra vez tuve la sensación de estar delante del mismísimo Dios.  El tipo sobre el escenario desprendía un aura especial y dominaba con su magnetismo todo su alrededor.  Estando en plena posesión de mis limitadas facultades mentales, la experiencia me sorprendió, asustándome un poco.  Eso fué con David Bowie, en los pirineos catalanes, en julio de 1997.

domingo, 17 de marzo de 2013

Paso de ser español


En Letra en Obras publicaron otra colaboración de un servidor.  Me vi con la fecha de entrega encima y no pude darle al artículo un par de vueltas más para dejarlo redondo y me quedaron algunas ideas en el tintero.  Se me olvidó rajar de la monarquía, entre otras cosas.  Diría que lo reescribiré para publicarlo en el blog pero eso no creo que suceda.  Miro la agenda y no tengo horas libres hasta octubre, así que se quedará como está.  El espíritu se capta, eso fijo...

Ah! está en galego, lengua de adopción para mi y materna para Letra en Obras.

viernes, 15 de febrero de 2013

El "Que os den" de Ratzinger

Supongo que si el obispo de Getafe, que nunca ha estado en Las Vegas ni ha pisado un casino en su vida puede opinar del proyecto Eurovegas, un apóstata como yo puede decir la suya sobre la escampada del Papa.  Al menos piso una iglesia de vez en cuando, la última vez por la boda de mi hermana, en julio del año pasado.

Si me interesa la elección del nuevo Papa es por dos motivos.  Por apostar pasta por algún candidato y porque me china que se pire Ratzinger.  Si, la verdad, me fastidia.  El tipo tenía buenas intenciones.


sábado, 9 de febrero de 2013

10 estrategias de manipulación mediática

Este texto se atribuye en muchos sitios a Naom Chomsky, lo que es incorrecto.  El autor original es Sylvain Timsit.  Aunque tiene sus días, es interesante porque hay muchos puntos que nos sonarán como cotidianos.

1. La estrategia de la distracción El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las elites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes. La estrategia de la distracción es igualmente indispensable para impedir al público interesarse por los conocimientos esenciales, en el área de la ciencia, la economía, la psicología, la neurobiología y la cibernética. ”Mantener la Atención del público distraída, lejos de los verdaderos problemas sociales, cautivada por temas sin importancia real. Mantener al público ocupado, ocupado, ocupado, sin ningún tiempo para pensar; de vuelta a granja como los otros animales (cita del texto ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.

2. Crear problemas y después ofrecer soluciones. Este método también es llamado “problema-reacción-solución”. Se crea un problema, una “situación” prevista para causar cierta reacción en el público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer aceptar. Por ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia urbana, u organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el demandante de leyes de seguridad y políticas en perjuicio de la libertad. O también: crear una crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos.

3. La estrategia de la gradualidad. Para hacer que se acepte una medida inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos. Es de esa manera que condiciones socioeconómicas radicalmente nuevas (neoliberalismo) fueron impuestas durante las décadas de 1980 y 1990: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad, flexibilidad, desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes, tantos cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de una sola vez.

4. La estrategia de diferir. Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de presentarla como “dolorosa y necesaria”, obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego, porque el público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente que “todo irá mejorar mañana” y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando llegue el momento.

5. Dirigirse al público como criaturas de poca edad. La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza discurso, argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles, muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura de poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante. Por qué? “Si uno se dirige a una persona como si ella tuviese la edad de 12 años o menos, entonces, en razón de la sugestionabilidad, ella tenderá, con cierta probabilidad, a una respuesta o reacción también desprovista de un sentido crítico como la de una persona de 12 años o menos de edad (ver “Armas silenciosas para guerras tranquilas”)”.

6. Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión. Hacer uso del aspecto emocional es una técnica clásica para causar un corto circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido critico de los individuos. Por otra parte, la utilización del registro emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar ideas, deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos…

7. Mantener al público en la ignorancia y la mediocridad. Hacer que el público sea incapaz de comprender las tecnologías y los métodos utilizados para su control y su esclavitud. “La calidad de la educación dada a las clases sociales inferiores debe ser la más pobre y mediocre posible, de forma que la distancia de la ignorancia que planea entre las clases inferiores y las clases sociales superiores sea y permanezca imposibles de alcanzar para las clases inferiores (ver ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.

8. Estimular al público a ser complaciente con la mediocridad. Promover al público a creer que es moda el hecho de ser estúpido, vulgar e inculto…

9. Reforzar la autoculpabilidad. Hacer creer al individuo que es solamente él el culpable por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de su inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo se autodesvalida y se culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición de su acción. Y, sin acción, no hay revolución!

10. Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen. En el transcurso de los últimos 50 años, los avances acelerados de la ciencia han generado una creciente brecha entre los conocimientos del público y aquellos poseídas y utilizados por las elites dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el “sistema” ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al individuo común de lo que él se conoce a sí mismo. Esto significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un control mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí mismos.

martes, 5 de febrero de 2013

Hijos de las Nubes



38 años después, los saharauis siguen sin solución.  La paciencia se les está acabando.  Se están dando cuenta que, a través de la diplomacia, del diálogo y de los cauces institucionales, no se consigue nada. Mientras les van dando largas, tanto España (su potencia colonial), Francia y Estados Unidos siguen explotando sus recursos: fosfatos, petróleo y bancos de pesca.  El reyezuelo de Marruecos continúa sonriendo por lo bajo y viviendo en la más indigna de las opulencias, mientras su pueblo vive en el umbral de la pobreza.

MIentras los intereses de los ricos sigan intactos, los de los pobres no importan.  Eso sucede allí y también aqui.  De las negociaciones pacíficas se mofan en todas partes.

Javier Bardem hizo un interesante documental sobre el asunto saharaui, cuyos Derechos son pisoteados a diario por Marruecos.

sábado, 2 de febrero de 2013

Más música


Como sigo sin poder enlazar letras para formar palabras y estas para construir frases y así consecutivamente para llenar más de media página para contar historias, me refugio en las canciones; que hagan sexo entre ellas y conformen sesiones DJ que, al fin y al cabo, no dejan de ser historias musicales de una hora y cuarto de duración.

Publiqué en el blog de las sesiones la Eclectic 31 que, con la 29 (que publiqué en diciembre), la 30 (que está en la cocina) y la 32, que haré en cuanto acabe con la última receta, serán una tetralogía resumen de lo mejorcito del 2012 en cuanto a pop, rock y electrónica independiente.  Siempre se cuela alguna canción de años anteriores pero es una licencia que me disculpo, supongo que los oyentes también.

La Eclectic 31 es una sesión de ritmos lentos y medios.  Técnicamente debería ser la primera de las cuatro, pero tampoco preparé la colección entera antes de ponerme a grabar y salió así.  Quien prefiera las cinco horas de música con un ritmo creciente ya sabe, que ponga esta al principio.

Supongo que el que viene al blog por el reproductor ya se habrá dado cuenta; también actualicé la playlist.  Hay ahora 113 canciones, todas del 2012 (salvo error de archivo) que son otro buen resumen del año, aunque sin mezclas (que tampoco son imprescindibles para escuchar música).

Espero que encontréis algún corte que os alegree un día.  Eso haría bueno el trabajo de traerlas hasta aqui.

miércoles, 16 de enero de 2013

Se han hecho imprescindibles (2)

Los grupos que llevan dos baterías siempre me intrigaron.  ¿Es necesario, realmente?  ¿No valía el apoyo de una caja de ritmos? Supongo que, durante la formación de la banda, ambos percusionistas se postularon con el deseo de yo quiero ser el bataca y, para evitar discusiones, alguien terció salomónicamente: Vale, vale, los dos tocaréis la batería, no os peleéis...  

Amén de esta divagación, el gran activo de Poliça es la sensualidad de chocolate blanco con la que te cubre progresivamente la voz de Channy Leaneagh.  Su disco, Give you to the ghost, es un billete de 45 minutos a una nube temporal en la que olvidarse de todo durante ese rato.  Y contemplar el trance de la vocalista interpretando sus canciones, hipnótico.  No vinculo el video oficial porque lleva anuncio, pero vale la pena comérselo.  Hay una interpretación en vivo en este enlace.



I could go es una perla pop que, por mor del fondo de xylófono y las ráfagas silbantes que recibe de acompañamiento, destaca por encima del resto de canciones en otro de los discos de 2012 que hay que tener, el Time Capsules II de Oberhofer.

Pero esas cápsulas de tiempo esconden otra joya destacable (esconden varias más), Heart. Cuando la melodía saltarina nos está contagiando y empezamos a sonreír despreocupadamente, Matt nos recuerda que no estábamos aquí para un rollito happy, ni mucho menos.  Sin mover un sólo músculo de la cara, toda una declaración de solidez emocional.

All that i asked for was a little bit of heart
I give you my love and you told me:
"We're apart"



Probablemente una de las canciones más repetidas en el canal Vh1 (si lo pinchas habitualmente, seguro que ya la tienes aburrida) Little talks es un himno campestre que, nuevamente, apuesta por la contradicción de utilizar melodías trotonas y festivas para contar un desamor.  Es una opción pragmática y una muestra de inteligencia emocional soberbia: Las lágrimas ya me empapan el alma, no hace falta que también mojen mi rostro. Ellos son Of monsters and men.


Por el placer es el explícito título con el que Ornamento y delito traen las ¿bajas? pasiones y el deseo al universo de las canciones.  Todo en el corte; la susurrante voz, las guitarras, los fondos de teclados y el penetrante ritmo de la batería, hacen que sea un sólido candidato a tema principal en una posible revisión de Las edades de Lulú.


No estaba muerto, por difícil que sea de creer.  Los excesos del ex-Sex Pistols John Lydon no pudieron con él.  Ni los que esparció con Sid Vicious con la mítica banda, ni los que desparramara con Public Image Ltd.  Este año pasado, PIL anunció nuevo lanzamiento, oh sorpresa, después de 20 años de su último trabajo de estudio.  Muy, muy digno.

Además del Deeper Water (en este live se puede ver que no sólo John no estaba muerto, si no que conserva una envidiable forma) uno se puede dejar llevar a lisérgicos estados con el narcótico compuesto que es el reivindicativo One Drop, demostrando que Lydon, a pesar de las (suponemos necesarias) gafitas de montura metálica, sigue siendo el irremediable inconformista que parió su madre.