domingo, 16 de octubre de 2011

Algo de música y el barreño de palomitas


he colgado en el blog de las sesiones una de 7 horas y 37 minutos.  Es un primer repaso a la New Wave de los ochenta.  Digo primer, por que para que quede un documento representativo de un movimiento que marcó una época habría que hacer, al menos, otra de similar duración.
La incluyo dentro de las La Cage Sessions, porque esa discoteca de Salou fué una abanderada del movimiento.  Sirva de homenaje al garito, pues.
Los que no tenían demasiado pendiente por escuchar, ya tienen una buena excusa para adentrarse en los detalles musicales de un movimiento que fue algo más que música.  Y si querías una lista de canciones extensa para una sesión de poker larga, pues este es un buen archivo.

Las listas son siempre subjetivas, sobre todo en música, mujeres (y hombres) y comida, así que la mía tendrá sus pegas, es posible.  Otra lista guapa para adquirir culturilla es la que proponen en la revista New Musical Express sobre las 150 mejores canciones de los últimos 15 años.  Tienen un link para convertirla en una lista para Spotify.  Con el orden de las canciones se podra discutir, pero la mayoría son grandes temas.

Añado una foto.  En un comentario a un post anterior, una lectora de latinoamérica me pedía que clarificara que es un barreño de palomitas.  Bueno, un barreño es un recipiente que se utiliza para tareas domésticas.  Las palomitas de maíz tienen varios nombres.  En Venezuela se llaman cotufas.   Pero lo mejor será que ponga una foto, por lo de que una imagen vale...



El ordenador que hay al lado es uno de pantalla de 11", para entendernos....
Ahora se venden en bolsas para microondas, lo que es un delito de lesa humanidad.  Las palomitas hay que hacerlas en una pota de aluminio y con aceite de oliva en cantidades generosas.  El que ha probado las mías sabe lo que digo...

sábado, 15 de octubre de 2011

Vinilos vs. Cd's vs. Virtual DJ (2)

Los Cd'-R ofrecieron una ventaja enorme a los DJ's.  Antes, si en un set en vivo querías poner 18 canciones, tenías que llevarte 18 vinilos o 18 cd's.  Con los grabables, esas 18 canciones cabían en un sólo disco.  No se si habréis visto alguna maleta de DJ con Cd's regrabables.  Las mias contenían todos los cd´s duplicados, por si alguno fallaba o si necesitabas dos canciones de un mismo disco.  Al lado, el contenido de cada uno, pulcramente impreso en excel.  Cada cd, con una etiqueta impresa.




Cuando me trasladé a Galicia, me quedé sin público para mis sesiones de revival de la New Wave.  Aqui apenas cuajó esa movida, así que abrí mi espectro de escuchas hacia el indie-pop.  De ahí nacieron las Eclectic Sessions, de las que tengo editadas 14.

A los gestores del Playa Club les gustó la propuesta y me ofrecieron una Residencia en la Nordic, donde hago un par o tres de sets en vivo al año.  Me gusta preparar las sesiones y, con el trabajo, tres días fuera de casa, antes no me daba tiempo para más.  Este año ha sido algo complicado a nivel personal y desde marzo he preferido recluirme un poquito más en casa.  Ahora ya va siendo hora de que vuelva a salir un poquito más.
 
Soy bastante meticuloso y perfeccionista.  Uno de los gadgets que adquirí fue una impresora con un kit para cd´s para poder sustituir las etiquetas por cd´s imprimibles.




En una maleta con 180 cd´s caben cerca de 3000 canciones.  Otro gol al vinilo en cuanto a portabilidad.

Hace un año y medio, me compré el Virtual DJ.  Hay otros programas que simulan un entorno de DJ, pero después de testear tres o cuatro, me decidí por éste.  Desde entonces, no he añadido ningún Cd a las maletas, que han quedado aparcadas.  Un millar de discos y un montón de horas de trabajo, durmiendo en una estantería.

Compré un disco duro portable de 600 gigas.  En él caben el equivalente a 1.400 discos.  Unas 25.000 canciones, al tamaño que se comprimen hoy.  El aparatito es del tamaño de una BlackBerry.  Con eso, un portátil, una controladora para el Software y dos cables, puedes ir a cualquier parte sin tener que cargar con las maletas de cd's.  Comodidad a tope y sin el riesgo de que te pierdan las maletas facturadas si coges un avión.

A estas alturas, hay que hacer un matiz; el trabajo de DJ consta de dos partes; una artística y una técnica.
En la parte artística entra la selección musical y la forma en que decides hacer las mezclas.  Eso no hay software que lo sustituya.  Por mucho equipo que tengas, si eres un tarugo, la sesión será un desastre.

La parte técnica consiste en, una vez decidido el punto donde quieres hacer la mezcla, efectuarla, normalmente cuadrando las baterías de los dos discos y subiendo el volumen de un plato y quitando el otro.  Con los vinilos, buscando la primera batería se emplea un tiempo precioso.  Soltar el vinilo en el momento adecuado, sin relojes que te orienten, requiere una destreza determinada.  Bajo la presión del directo, más aún.  Efectivamente, hacer una buena sesión (técnicamente hablando) con vinilos es mucho más difícil que con cd´s o con software.  Y tiene su mérito, su encanto y hay que reconocerlo.

Pero el software ofrece varias ventajas sobre los cd's y, por ende, sobre los vinilos, para facilitar la parte técnica del trabajo de DJ.  Ya he dicho que sobre la vertiente artística no hay milagros.

1- Memoriza varios puntos en una canción.  Eso, con el vinilo, es imposible.  Buscar la primera batería buena para soltar la canción lleva un tiempo que con el Virtual, se consigue oprimiendo un botón

2- La búsqueda de canciones y la forma de ordenarlas, ya sea por BPM's (velocidad de la canción) o por orden alfabético.  Con dos toques de ratón tienes localizado un tema en el Disco Duro, o las canciones ordenadas por velocidades, con lo que es mas sencillo encontrar una que vaya a quedar bien con la que está sonando.

3- Puedes grabar lo que estás haciendo directamente al ordenador, sin cables y en calidad digital.

4- El soft te avisa si tratas de parar una canción que está sonando.  Que levante la mano el Dj que nunca ha dejado en silencio una pista, aunque sea un segundo, por equivocarse de plato.

5- Yo no uso efectos.  Mi forma de poner música es enlazando canciones.  Pero el soft permite loops, efectos varios y la adición de samples con dos clics de ratón.

6- Con el Virtual DJ puedes pinchar vídeos.  Este creo que es el futuro.  El problema estará en hacerse con una colección importante de los mismos y el tamaño que ocupan.

7- Si prefieres el tacto del vinilo, hay kits de vinilos con mp3.  Se pueden conectar unos platos espceciales al Virtual DJ.  Análogamente, se pueden conectar a la controladora platos tradicionales, mediante los que puedes hacer sonar 4 fuentes simultánemente.  He visto pinchar a 4 platos, pero eso está al alcance de los genios.  Con la ayuda del soft, eso puede hacerlo gente con menos experiencia.

8- El soft tiene una onda de audio a la vista que te permite cuadrar las baterías visualmente.  Esto es especialmente útil en locales donde el sonido no llega bien a la cabinda del DJ.  Para determinados estilos, cuenta con la opción de cuadrar las baterías automáticamente, con lo que todo ese trabajo que tiene que hacer el DJ de vinilos (si no sabe de memoria los pitch) te lo ahorras.

9- El formato de sesión ha cambiado definitivamente.  Antes, cuando te daban una cinta para que la grabaras, preferías que fuera de 90 minutos.  Las de 60 tenían dos caras de 30 y eso, en 6 o 7 canciones, estaba lleno.  Con la llegada de los cd´s, las sesiones tipo pasaron a tener una hora y poco más, limitada a la capacidad de 74 minutos de un cd.  Esa curiosa medida es por que es lo que dura la novena sinfonía de Beetoven.  La mayoría de cd's de ahora tienen una capacidad de 80 minutos.
Si grabas un archivo digital, puedes hacerlo durar lo que quieras.  Ahora mismo estoy terminando de editar una sesión de... 7 horas y media, el equivalente a 6 discos, en una sola pista.  Esto, para locales donde no tienen DJ es perfecto.  Grabas la sesión, le das al play cuando abres y no hay que preocuparse de la música hasta la hora de cierre.

Si Pedrosa y yo hacemos una carrera en vespa, seguro que me gana.  Pero si él va en Vespa y yo puedo coger la Daytona, es más que probable que le gane.  Hacer el Dakar en bicicleta tendrá mérito, pero en moto llegas antes.

Me parece estupendo que la gente prefiera pinchar en vinilo de la misma forma que me parece perfecto que alguien se compre una moto para pasear.  Yo también se hacerlo, pero del mismo modo que cuando me monto en la Daytona es para correr, si uso el Virtual DJ es por que consigo mejores resultados que con los vinilos.  Y ese resultado final, creo, es lo que cuenta.  Mejor final con menor trabajo.  Para mi está claro.
No se trata de renegar de una forma de hacer las cosas, si no de adaptarse a las nuevas tecnologías y sacar provecho de ellas.

viernes, 14 de octubre de 2011

Vinilos vs. Cd's vs. Virtual DJ

Ser Disc Jockey profesional es algo serio.  Yo soy un mero aficionado, que conste. Tengo un equipo completo en casa y de vez en cuando pongo música en vivo, un par o tres de veces al año.  Pero como todo lo que hago, me lo tomo en serio.  Y cuando me pongo, es para hacerlo lo mejor que se pueda.  Las cosas, o se hacen bien, o se dejan para otro día.
Por eso no entiendo demasiado el cierto desprecio que tienen algunos Disc Jockeys aferrados al vinilo por los que prefieren las nuevas tecnologías.

Yo empecé (en 1985) pinchando con vinilos.  Con unos platos Lenco de correa.  Los primeros Technics que pude trastear fueron los de La Cage.  Eso era tecnología espacial, comparado con el resto de platos. La diferencia entre los Technics y cualquier otro plato era el pitch (para graduar la velocidad del disco).  Con la mayoría de la competencia, el sistema de tracción. Trabajar con unos Technichs era una gozada.  Recuerdo que estuve una temporada poniendo discos en un sitio de Reus que se llamaba Glop's, por amor al arte, sólo para poder trabajar con esos platos.  Y para grabar infinidad de cintas...

Sobre el 91 o 92, hubo un cambio de rumbo musical en La Cage de Medrano, una discoteca que, para mi, era la referencia en ese sentido.  El resto de los 90 los he considerado una época muy flojita musicalmente hablando y dejé de comprar música casi compulsivamente, como hacía.  Tampoco había demasiado en que gastar, la verdad.

En 1998, me instalé en una bonita casa de pueblo que un tipo había reconvertido en apartamentitos pequeños.  Para una persona sóla o una pareja, a lo sumo.  La puerta que se ve es la que daba acceso al mío.  Las ventanas de arriba son de los vecinos. y la que queda debajo de la escalera, de otros vecinos.  Todo muy bien aprovechado.




La vista que te encontrabas, al salir de casa, llenaba el espíritu.  A la derecha, al lado de la pérgola que se ve, había una barbacoa y subiendo las escaleras que se ven abajo a la derecha había el acceso a dos apartamentos más y a una terraza-solarium de 200 m2, desde la que, a lo lejos (10 kms) se veía el mar, algo fundamental para mi.


Supongo que Cuca echa de menos aquello.  Ahora vive encerrada en un piso y aunque la dejo salir por las noches un rato, a patrullar la comunidad, no es lo mismo, por supuesto.  Tete ni se acuerda.  Nació allí, pero se vino para acá con apenas un mes de vida, con lo que poco disfrutó del jardín comunitario.


El apartamento, como dije, no era muy grande.  Cocina-comedor...


A la izquierda quedaban dos habitaciones pequeñas y un baño y a la derecha el sofá y la tele.  La foto está tomada desde unas escaleritas que conducían a un altillo.



En ese rincón me monté un equipo de música y otro de informática bastante aceptable. Un escondite perfecto para perderse y en el que pasé muchísimas horas con los decibelios por las nubes. 


Había comprado dos Pioneer CDJ-100, las lanzaderas más básicas que había (de una buena marca), una mesa de mezclas que aún conservo, un plato Technics y una grabadora Pioneer de audio. Aún no había aprendido a mandar la señal a un ordenador ni a trabajar con ella.

Cuando probé las Pioneer, se acabó el vinilo.  Los relojes proporcionan una cantidad de información brutal, comparado con el plato.  Hay muchos DJ's que tienen buena memoria para recordar datos sobre las mezclas pero yo, en aquella época, igual podía pasar dos o tres semanas sin tocar el equipo, así que tomaba notas en excel de todo lo que hacía.  Pruebas y pruebas y en cuanto tienes una mezcla controlada, con esas anotaciones eres capaz de repetirla a la perfección aunque pasen seis meses o seis años que no la haces.  Son detalles que un DJ que toque música todos los días no necesita hacer.

Algun@ se echará las manos a la cabeza por lo de los vinilos.  Que si la calidez del sonido, que si los clics, que si tal... Es cierto, los vinilos suenan diferente.  Yo lo solucioné digitalizándolos.  Tenía cerca de un medio millar, así que fueron unos cuantos sábados por la tarde dedicados a tal menester.  Cuando terminé, metí el Technics en una caja y ahi sigue.  De eso hace 10 años y desde entonces no he sacado ninguno de los vinilos de su funda.  Ni el plato de la caja.  Regalé algunos vinilos, vendí otros (algunos aún están por cobrar) y me quedé con una selección de lo mejorcito.

Fuí de los primeros en tener internet en el pueblo. El Napster primero y el Audiogalaxy después, sacaban humo.  Era el inicio del P2P y al intercambio de ficheros musicales le dediqué un tiempo muy fructífero.  Todos los cd´s y los vinilos digitalizados que tenía los puse a disposición del que quisiera y conseguí algunas joyas de la época dorada que me faltaba.

Empecé a grabar sesiones, todas las que hay colgadas en el blog de las sesiones y alguna más que no pongo por vergüenza... Me especialicé en la New Wave ochentera y  presenté algun set revival en directo en varios sitios, en La Cage de Medrano uno de ellos, lo que venía bien para complementar los ingresos mensuales.

Esto va para largo, como me enrollo.  Lo termino en otro post...

Selección Natural

Me compré El Jueves por que la portada prometía.


La compré el mismo día en que Durao Barroso anuncia una regulación (que ya veremos si llevan a cabo) en la que pretenden impedir que se paguen bonus a los directivos de las entidades financieras que precisen rescates.  A buenas horas.
No soy capaz de encontrar dónde leí que con todo el dinero que se ha destinado a reflotar bancos, se podrían haber cubierto las hipotecas de todas las familias que han perdido su vivienda.  Ese dinero hubiese ido a parar a los bancos, de todas todas y el país se habría ahorrado cerca de 200.000 dramas.  No me parece nada demagógico el argumento, al contrario.

De vuelta de la compra, me encuentro con Maceiras Sr. en una terracita.  Bla, bla, el tiempo, bla, bla y le comento lo de mi cita con el neurocirujano, que sigue en la nebulosa del Sergas, pendiente de asignar día.

Contestación: "Lo que están haciendo contigo, Bidan, es pura selección natural.  Putean a los especímenes defectuosos para que no se reproduzcan y así mejorar la especie.  Además, de este modo están reduciendo las probabilidades de que llegues a los 67 y te tengan que pagar una pensión".

Excelente humor, el del alcalde.  Creo que llamaré al Sergas y les notificaré que ya hace tiempo que decidí no reproducirme y que tengo un plan de pensiones privado, a ver si así se apiadan de mi espalda.

Dos días después de las palabras de Maceiras, no estoy tan seguro de que lo dijera en broma...

martes, 11 de octubre de 2011

Unknown Pleasures

Para un ciclotímico profesional como yo, el otoño es la peor época del año.  Es cuando suelo tener más cambios de humor y los días pesimistas aparecen con más frecuencia.  Ya hace algunos años que las estaciones parecen haberse desincronizado del calendario y solemos tener excelentes septiembres y octubres.   

La novela avanza a trompicones.   Un día consigo escribir 9 folios y el resto de la semana apenas lleno otros 10.  Ha decidido que se escribirá a su ritmo y no al mio.  Bueno, no seré yo quien le lleve la contraria.

De lo que he visto estos últimos días, imprescindible para entender una época es 72 horas... y Valencia fue la ciudad, que narra la movida valenciana de finales de los ochenta y principio de los noventa.  Como un movimiento alternativo basado en una música escogida fue degenerando en electrónica infumable para consumo de masas.  Los fines de semana, hasta 50.000 personas se desplazaban hasta Valencia para ir de fiesta tres días.  La entrañable y querida Ruta Destroy se convirtió en la Ruta del bakalao, a medida que las mescalinas (Bunbury habla sobre ellas en el documental y Loquillo compuso una canción) fueron sustituidas por el MDMA, luego por el speed y la cocaína y finalmente la entrada de las anfetas y el policonsumo.  El tecno le ganó la batalla a las guitarras y las diferentes tribus dejaron de tener buen rollo entre ellas. Creo que la última vez que estuve por allí fué en el 91 o el 92 y la cosa ya empezaba a degenerar bastante.  En este link, un tipo de la zona hace un relato bastante detallado de como vivió todo el cambio.  En este otro enlace se puede ver el trailer del documental.

Me encantaron, también, Control, una película sobre Joy Division, basada en el libro que escribió su mujer y el documental homónimo, Joy Division, donde todo el entorno de la banda cuenta anécdotas a raudales.  Ian Curtis es un tipo que me ha fascinado desde que cayó en mis manos un documento con la mayoría de lo que escribió y que un día tengo que traducir al gallego.  Aqui se le entendería bastante bien su melancolía vital.
Ian siempre se sintió solo, pero tampoco estaba a gusto en compañía de gente.  Un genio musical que se suicidó el día antes de que la banda saliera de gira por Estados Unidos y dos semanas después de que Love will tear us apart, una de las mejores canciones de la historia, llegara al número uno.  Colgándose, nos privó de su talento.  Buceando en sus extensos  y melancólicos escritos, uno se encuentra ante un alma torturada cuya única vía de escape era la música, pero que no supo encajar una fama que le hacía sentirse más solo todavía.

Joy Division dejó dos discos.  Con la muerte de Ian, la banda se recompuso en New Order y han seguido en activo hasta hoy día.  Unknown Pleasures, para mí, es el inicio de mi música.  Cuando digo que no me interesa nada anterior a 1980, me refiero a ese disco, editado, maticemos, en 1979.  Hay algunas excepciones anteriores, pocas. También en 1979, The Cure sacaron Three imaginary boys y Boys don´t cry; The Clash el London Calling (disco que descubrí no hace mucho, gracias a Pacocho, que paso parte de su juventud en Inglaterra); B-52´s debutaba con un excelente disco con otros dos temazos para el top-100, Planet Claire (aqui en un impresionante directo de 1983) y Rock Lobster y, aunque no es de este estilo, Pink Floyd sacaban The Wall. En 1978 se publicó el debut de The Cars, el Parallel lines, de Blondie, The Man-Machine, de Kraftwerk.  En 1977, Iggy pop publica The Idiot y Lust for Life; Talking Heads, 77 y David Bowie, Low.  De 1976 son el debut de los Ramones y la canción Wild is the wind, de Bowie, un tema que fué la bandera de los nuevos románticos.  Es posible que me olvide alguno, por supuesto, la memoria no es infalible.  
En otra vida igual me intereso por lo que se hizo antes de estos discos.  En esta no creo que tenga ni tiempo ni ganas.

En Unknown Pleasures, Joy Division evoluciona sobre la simpleza del punk para crear un estilo único; oscuro, metálico, denso, melancólico,  que influenció a todo un movimiento que marcó mi juventud, la New wave. She´s lost control está basada en la historia de una chica epiléptica (como él) a la que vió morir en un ataque, pero que tiene una doble lectura. Shadowplay es un paisaje brumoso, gris y decadente, como el Manchester de la época y que supuso su primera aparición televisiva, en el programa del mítico Tony Wilson. New Dawn fades un solemne requiem mortuorio y Disorder otra muestra lírica y musical de la intrigada mente de Ian.  No he puesto los enlaces a los videos oficiales por que tienen anuncio delante y es una cosa que me china un montón.
La portada del disco es una de esas que te impulsan a comprarlo sólo por contemplarla mientras te dejas llevar por la música..



En Closer se encuentra, entre otras joyas, Decades, uno de los lamentos mas desgarradores que pueden salir de un alma. En el enlace viene subtitulada de aquella manera, aunque traducir a Ian Curtis no es nada sencillo. Twenty four hours y The eternal son desolación, derrota y depresión, fiel reflejo de lo que sucedía en el interior de Ian.  Isolation y Heart and Soul marcaron, con la adición de unos teclados muy marcados, el que sería el sonido de New Order.
Como una funesta premonición, la portada de Closer es una tumba.


A partir de ahi, la mejor década de la música, los 80.  Vale la pena ver las dos cintas mencionados para conocer la historia de un grupo que tuvo mucho que ver en la explosión creativa que vino detrás suyo.  Para hacerse una buena idea del génesis de toda esa movida hay que ver 24 hour party people, otra entretenida película con una banda sonora excepcional.

jueves, 6 de octubre de 2011

It Ain´t no Love

Cuando llama la cartera a las nueve de la mañana me pilla en un sueño profundo del que ni consigo, ni quiero salir.  Total, sea lo que sea, estará en el buzón más tarde...

Efectivamente, un papelito blanco y amarillo y ni es de tráfico ni de hacienda, que estos días estamos siendo todos demasiado a menudo.  Viene de Madrid, así que ya se lo que es y corro (en sentido figurado, claro) a Correos a por el paquetito.

Lo abro y, efectivamente, contiene el único cd que me he comprado este año, el It ain´t no love, de Bandini.  Tengo una lista de la compra muy larga, pero no está la economía para dispendios, por el momento.  Tenía un resto en paypal y en esto lo invertí.  Bandini tiene su página oficial, pero contacté con ellos a través de facebook

El pack huele mitad a disco, mitad a libro. Viene impreso en cartón, lo que les añade a los cd´s una sensación de fragilidad y delicadeza que te impulsa a manipularlos con más cariño aún. Además, en el sobre venían dos chapitas del grupo.  La que pone How is your mind? me la pondré, seguro.





Les pedí si me lo podían mandar autografiado por todos los miembros del grupo.  Tardó un poquito más, pero la espera valió la pena.  


El cd trae un libreto con las letras, lo que siempre es de agradecer por aquellos cuyo inglés no nos es demasiado fluido.




Puesto en casa mediante correo certificado han sido 14 euros, un precio la mar de razonable.

Este es el segundo trabajo editado de Bandini.  Salió el año pasado, aunque no me enteré hasta hace un par de meses y no será por que no lea revistas de música...

El primero, The Sunny Album, les valió la etiqueta de americana, con la que no estoy nada de acuerdo. 
El título del doble álbum es sarcástico, ya que no hay un sólo rayo de sol en las catorce canciones que contiene.  Algo, quizá, en Happy to be me.  Pero enseguida la apaga. I swear i´m happy to be me, and if i ever fall in love time will let me know i can not be good enough for you  (Juro que soy feliz de ser como soy y si algún día me enamoro, el tiempo me hará ver que no puedo ser suficientemente bueno para ti).

De las catorce canciones, Did you ever have a dream like mine?, Something goes wrong, Happy to be me y How is your mind entran muy fácil.  Pero faltan dos joyas por nombrar.

No he escuchado aún It ain´t no love.  Espero al momento adecuado, cuando termine hoy mi sesión de escritura. Creo que es el primer cd que compro sin haberlo escuchado previamente, en cuatro o cinco años. El otro fué el Sam´s Town de The Killers, que ya sabía que iba a ser brutal.  
Si lo compro a ciegas es por que tipos que han sido capaces de tocar las dos siguientes piezas merecían ese voto de confianza.  Son dos lamentos profundos que me han acompañado en momentos en esos en los que el ánimo no está para bailes festivo y necesita una banda sonora algo más melancólica.
Si alguien está de buen humor, mejor que se pase por aqui otro rato...

En Together, la primera mitad de la canción es muy buena.  Pero la segunda, y el minuto final son de gallina de piel...

She dives into the lake         Ella se submerge en el lago
where she lives                                           donde vive  
and not wuthering height    no en cumbres borrascosas
Can´t keep her back           No puedo hacer que vuelva

She is always giving her best    Ella siempre da lo mejor
But she never gives                     pero nunca puede dar
what she wants                                        lo que quiere
what she feels                                          lo que siente
what she needs                                     lo que necesita
what she loves                                            lo que ama

And while the snow falls         Y mientras la nieve cae en
on our lakes and mountains     nuestros lagos y montes
as the cowardice                            mientras la cobardía
gets hold of us                         Se apodera de nosotros
We could not be happy              No podemos ser felices
together                                                           juntos



Depression hace honor al título.  No sólo la letra.  Los instrumentos y la voz de Richard conforman este otro suspiro desesperanzado.

It´s raining pain in Norway        Llueve dolor en Noruega
what i can do is wait         lo que puedo hacer es esperar
until it stops                                           hasta que pare
the trees are crying snow             los árboles lloran nieve
and i don´t feel better                   y no me siento mejor
watching this                                   contemplando esta
beatiful sadeness                                     bonita tristeza
and the sorrow grows               y el sufrimiento aumenta
while the past fills                 mientras el pasado se llena
with the music of chance   con música de oportunidades

They´ve called it                               Ellos lo definieron
depression                                                    depresión
I´m not the one                                           Yo no soy
who invented it                                    quien lo inventó 



Siempre dije que la vida no es sólo alegría y fiesta.  Y que puede haber mucha belleza en la tristeza y en la oscuridad, sólo hay que saber verlo.  Si consigues que tus momentos bajos los acompañe una melancolía bonita, siempre los sobrellevarás mejor.  Por eso es bueno tener un fondo de discoteca preparado para cuando vienen torcidas en la vida, que más tarde o más temprano, terminan viniendo....

Mmmm.  Ya sólo faltan cuatro horas para colocar It ain´t no love en el reproductor...

domingo, 2 de octubre de 2011

2 de Octubre, 30º

Despierto a las dos de la tarde en el sofá.  Quise ver las carreras de motos, pero la deficiente señal de T.V. que tenemos en Miño con la marea baja y el cansancio acumulado me dejaron frito antes de que empezara Moto2.  Llevo unos cuantos días durmiento pocas horas, liado con varias cosas a la vez y el cuerpo, que de si mismo sabe un rato, hoy decidió que tocaba que le devolviera las horas de sueño que le he robado estos días atrás.  
Una pena que, para una vez que gana Pedrosa, me quedo dormido y no lo veo.  Igual hablo con él para que me pague por no ver sus carreras y no gafarle así con mis ganas de que llegue primero.

Fuera hace un día de verano espléndido y miro el ordenador para confirmar la fecha; 2 de octubre.  Bajo a tomar un café y a disfrutar del día que no entiende de calendarios, en la terracita que tengo al lado de casa.  No me arriesgo a leer las noticias, para no quedar anonadado con sucesos como el del típo que le descerrajó un tiro en la cara a una embarazada, en una Iglesia, historias que me suelen dejar un rato dándole vueltas a que carallo puede haber dentro de la cabeza de alguien para cometer tal barbaridad, sin obtener respuesta válida, así que me sumerjo en los dominicales, que siempre traen algún artículo interesante.  
Antes, me entretengo con la foto de portada de La Voz, donde se ve la playa coruñesa, el día anterior.  Suelo contar los top-less que hay, en un entretenimiento que, me consta, no soy el único que practica, aún a riesgo de perder alguna dioptría en el esfuerzo.

Las conversaciones de las mesas de mi alrededor giran todas en torno al día de playa que hace. Aqui somos muy dados a hablar de la climatología y caigo en la cuenta del tiempo que hace que no suena el teléfono a las nueve de la mañana de un domingo.  Antes, la gente de interior llamaba a cualquier número de Miño, al azar, para preguntar que día teníamos.  Si tu respuesta era la que esperaban, sol, cogían los bártulos y se venían a la playa.  Eso ya no sucede.  Supongo por que internet está bastante más extendido que hace cuatro o cinco años y es más fiable consultar el Meteogá que llamar a un teléfono a bollo y arriesgarte a que un lugareño te mienta para que no vengas a ensuciar la playa.

En los suplementos, la aparición del presunto broker en la BBC copa muchas opiniones.  Sea un actor o no lo sea, no contó ninguna mentira. La codicia, después del sexo, es el segundo motor de la humanidad.  Indignarse por que hay gente muy codiciosa es bastante hipócrita.  Codiciosos los hay a todos los niveles.  ¿O no fué la avaricia lo que movió a mucha gente del montón a poner los ahorros de toda una vida en mano de unos timadores muy bien organizados, en el caso de Fórum Filatélico, por poner un ejemplo?.  
Sucede que hay gente que tiene más medios que la mayoría para sacarle rendimiento a sus anhelos de conseguir más dinero, como es el caso de los brokers que mueven el dinero de los codiciosos.  Indignarse por eso puede ser hasta hipócrita.  Lo que habría que hacer, en todo caso, sería poner trabas en forma de impuestos a las especulaciones financieras y no criticar unos sentimientos que son esencia en el ser humano.

Después de leer un artículo sobre Steve Jobs, quien parece que disputa una lucha muy complicada contra el cáncer, apunto en la BB (que ha sustituido definitivamente a mi característica libretita) la frase que cierra el reportaje.  
Steve Jobs es un tipo peculiar lleno de anécdotas sobre su forma de trabajar.  El autor de la frase "La gente no sabe lo que quiere hasta que se lo muestras" es el culpable intelectual de mucha de la tecnología portátil que utilizamos a diario.  La noche anterior a la presentación del iPod, por ejemplo, hizo cambiar todas las clavijas de conexión por que no hacían el "click" adecuado al insertarlas en su invento.  
Al contrario que Bill Gates, deja el asunto de las contribuciones sociales a su mujer, por considerarlas poco productivas.  Es un tipo que siempre fue un adicto al trabajo y que, ahora, se ha visto obligado a dejar sus cargos en el curro y destinar su tiempo a lo que más quiere, su familia.  Nadie le ha preguntado cuantas horas de las que destinó a trabajar quisiera recuperar, ahora, para estar con los suyos.  La pregunta sería incómoda, al menos.

La frase anotada es: "La muerte es el mejor invento de la vida.  Desde los 17 años, cuando me miro al espejo, me pregunto si lo que voy a hacer hoy sería lo que haría si fuese el último día de mi vida".

Me recuerda, por enésima vez este año, la importancia de cada día que tenemos de regalo.  
Pienso en el legado que le dejaría yo a la humanidad si muriese mañana y trato de hacer una lista.  Es fácil.  Con un folio en blanco, no hace falta bolígrafo.  
Me pregunto si es necesario que deje algún tipo de legado, a la humanidad.  Esta pregunta es interesante pues si la respuesta fuese "no", haría bien en tirarme mañana mismo de un puente. Quizá, lamentablemente para la especie, creo que si puedo dejar un poquito de huella.

Empezaré por terminar la sesión de música New Wave de los 80 que inicié hace un par de meses y que estoy colgando el el blog de las sesiones Pretendo que sea una colección de canciones que marcaron una época.  De la música y de la vida de mucha gente.  Nada más, que no es poco.  Ya existen algunas compilaciones en cd, pero nadie (aún) trató de hacer una sesión de 7 horas, toda de seguidito.  Ahora mismo ya llevo cinco grabadas y publicadas.  Cuando la acabe, habrá una segunda parte, aunque ésta esperará unos meses.  Otras compilaciones musicales están antes en la lista de tareas.

La novela pasa a ocupar un plano absolutamente preferente en mi tiempo.  No tiene, necesariamente, que formar parte de lo que deje hecho en esta vida.  Pero puede ser una palanca para hacer otras cosas.  Y no sabré si realmente es una mierda, o no, hasta que la termine, así que cuanto antes lo haga, antes lo sabremos.  Con el debido apresuro, pero sin imprimirle prisa innecesaria ninguna.

Son pequeñeces, para empezar.  Tengo alguna idea algo más interesante encima, pero no dejaré que me invadan los delirios de grandeza hasta que no me demuestre que puedo empezar (y terminar, ahí es donde fallo muchas veces) tareas más humildes.

sábado, 1 de octubre de 2011

Hit the road, Jack

En principio, no me interesa la música hecha antes de 1980.  En esa restricción hay una docena de excepciones de finales de los 70 y la esencial formación clásica que todo enfermo de la música debe tener.  En 1982, cuando empecé a comprar discos, lo que primaba era ser moderno.  Led Zeppelin, Supertramp, The Doors y muchas otras bandas, incluidos los Beatles y los Rolling Stones formaban parte del universo musical de los viejos.

Con el tiempo he seguido manteniendo esa restricción por una suma de ley de probabilidades más falta de tiempo.  Las odds de encontrar una canción buena de verdad sobre cada disco escuchado son mucho menores en los discos antiguos que en las publicaciones más actuales.

A raíz de la serie de artículos sobre canciones que cuentan historias poker, cartas y gamblers  que estoy publicando en Poker10, ha sido una necesaria documentación acerca de algunos autores (de otros he pasado olímpicamente.  Las odds de que me sorprendieran eran cero).  Cuando publiqué el post relativo a Losing Hand, de Ray Charles, escuché un par de discos de grandes éxitos suyos.  Hay que reconocer que poca gente en la historia de la música que conozco tiene un sentido del ritmo como ese tipo. Es marcheta en estado puro.

Una de las canciones que más me gustaron fué Hit the road, Jack, así que me puse a buscar versiones.  Ahí va una recopilación de lo mejor que he encontrado.

El vídeo original:



La versión original con mejor sonido:



Una versión de 1969 de Jerry Lee Lewis, otro tipo que ritmo tenía.



La visión de Buster Poindexter.  Mola el escote de la partenaire.  Ahí es imposible fallar con una bolita de papel...



Cuanto más se respeta el original, mejor suena el cover.  Ahora son las Weather Girls...



Algunas orchestas modernas la incorporan a su repertorio.  Menudo chou montan estos en el escenario....



Hasta Eric Clapton la ha soltado en algún directo...



The Residents es uno de los grupos fetiches de la New Wave.  También han hecho su particular versión: